En estos días y noches lluviosas del otoño que acaba de empezar, no he podido evitar recordar aquella sensación angustiosa que me ahogaba el corazón y el alma por las noches, cuando escuchaba diluviar desde el confort de mi cama, hace dos años en mi apartamento de Bogotá, porque en Colombia no llueve, diluvia, y a cada gota caída del cielo, le acompañaba otra que derramaban mis ojos.
En unos día me volvía a España, y allí se quedaba él, sin poder hacer nada…¿Qué hacer con tanto amor que albergaba mi corazón? ¿Que haría cuando ya no tuviera frente a frente a mi luz, mi sol? Él iluminaba todo pero aquella historia llena de aventuras se había terminado. Solamente quedaba una salida: volver a encontrarme, buscar mi propia luz dentro de mi y comenzar de nuevo a diez mil kilómetros de distancia.
Llueve, llueve y llueve…
Llueve, llueve y llueve… Miro por la ventana y llueve…
Me desgarra por dentro, un vacío inmenso, no siento nada, ausencia de sentimientos pero el dolor me asusta, me frena en seco, me anula, me para, no se trata de ti, no se trata de mí, ni de la ausencia, de los kilómetros que nos separan…es lo que ha despertado mis ganas…
Frente a frente, en el minuto exacto que mis ojos encuentran tu mirada, de qué sirvió me pregunto…Pues ahora la distancia nos separa…no sirve de nada… Llueve, llueve y llueve, miro por la ventana, la luna no refleja hoy su luz en la calle mojada, truena, no tengo guía en esta noche extraña…miro por la ventana…las gotas caen, tengo ansia…no sirve de nada…ansia de ti, ansia de mí, de encontrarme, de encontrarte, de sentir tu fuego en esa mirada…
De reflejar en ti, que sientas lo que en verdad esconde mi alma… De volver a escuchar tu dulce voz, tus palabras… De decirte que la luz de tus ojos es mi calma…la esperanza de mi condena…lo que en verdad me llena…de expiar mis culpas, por no atreverme a romper las reglas…
Llueve, llueve y llueve…miro por la ventana…ya no sirve de nada…
Sensaciones de amores en la distancia
No sé si alguna vez has experimentado lo que es amar en la distancia, pero es algo que implica tantas cosas…demasiadas, desde la confianza plena que tiene que existir entre los dos, la complicidad, las noches en soledad pensando que podrías estar durmiendo a su lado, hasta la planificación de los horarios para poder cuadrar y hablar por teléfono o videollamada. Lo peor con diferencia para mi eran los fines de semana, los temidos viernes, cuando llegaba el viernes me hundía por completo, ya no tenía que ir a trabajar, no tenía en qué ocupar o distraer mi cabeza, todo el mundo hacía planes con su pareja y yo ahí más sola que la una enganchada al móvil esperando a que me mandará un whatsapp para escribirnos o conectarnos a skype.
También tiene sus cosas buenas, los reencuentros son maravillosos, y el saber que dispones de un tiempo limitado para disfrutar de tu pareja te hace vivirlo y sentirlo al máximo, cada minutos que pasas con esa persona se convierte en oro, pero no aguanté la distancia, no superamos la prueba, y cuando intentamos por fin estar juntos no funcionó. ¿Tiempo perdido? no creo, de toda experiencia se aprende y se evoluciona.
¿Tú has vivido algún amor así? ¿Triunfó el amor o la distancia? ¿Cuáles han sido tus sensaciones al respecto? Yo lo único que tengo claro que ni la mejor de las tecnologías hoy en día, salva un amor en la distancia si dos no quieren y se esfuerzan por ello, ahora que tenemos más medios a nuestro alcance para estar en contacto aunque estemos lejos, las relaciones se acaban con mayor frecuencia y rapidez que en épocas antiguas que no contaban con tantos adelantos para comunicarse, por qué será…
Besos Sensacionales de Allegra
Me gustó todo, el último párrafo es fenomenal
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias!!
Me gustaMe gusta